Que en este nuevo solsticio, los dados del destino os concedan los mejores números, para avanzar felizmente por ese tablero, lleno de trampas y sorpresas, que es el Juego de la Vida.
Y si caéis en el laberinto, no os preocupe, podéis volver a la casilla 30 y seguir jugando...
Porque como dijo el clásico, Publilius Syrus:
"occasio aegre offertur, facile amittitur".
[La ocasión se presenta con dificultad, pero se pierde fácilmente].
Lo que Ruíz de Alarcón, expresó en forma versificada:
"Tiempo, lugar y ventura
muchos hay que lo han tenido,
pero pocos han sabido
gozar de la coyuntura".
Salud y fraternidad.
1 comentario:
El Juego de la Oca nos brinda también lugares que, aunque pensemos que están para castigarnos -como la cárcel o el pozo- en el fondo nos indican la necesidad,a veces, de hacer un alto y meditar. El solsticio de invierno es una buena época para hacerlo, para dejarse caer deliberadamente en la cárcel o en el pozo, y permanecer algunos turnos sin jugar, con la esperanza de que, una vez terminado el necesario reposo, saldremos plenamente renovados a continuar afrontando las vicisitudes del Camino. Así pues, mientras ese momento llega: Feliz Solsticio. Un abrazo
Publicar un comentario